Por primera vez en el año, un vuelo con ciudadanos argentinos expulsados de EE.UU. aterrizará esta semana en el país. El operativo se da en el marco de la política antimigratoria de Donald Trump y bajo el silencio del Gobierno de Javier Milei.
Entre este miércoles y jueves se espera el arribo a Ezeiza de un avión con argentinos deportados desde Estados Unidos. El vuelo, operado por la aerolínea Omni Air International con un Boeing 767-300 de 247 plazas, hará escalas en Colombia y Brasil antes de llegar a la Argentina, según confirmaron planes de vuelo de la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) de Brasil.
Aunque no se sabe cuántos argentinos serán repatriados en este operativo, el diario Clarín informó que ya son 300 los connacionales expulsados desde enero, cuando Trump recrudeció su política migratoria.
El endurecimiento coincidió con las gestiones del Gobierno libertario para ingresar al Visa Waiver Program, mientras que la administración estadounidense lanzó en Argentina una campaña publicitaria para desalentar la migración ilegal.
Durante estos vuelos, los migrantes son escoltados por agentes de deportación norteamericanos, quienes retornan a su país tras cumplir con la entrega de pasajeros.
Las principales causas de deportación incluyen: ingreso irregular, permanencia más allá del plazo autorizado, violaciones a la visa, delitos, amenazas a la seguridad pública o incumplimiento de leyes locales.
La secretaria de Seguridad Interior, Kristi Noem, reveló que más de un millón de personas se autodeportaron utilizando la app CBP Home, una herramienta digital para gestionar la salida voluntaria. Además, anunció la contratación de 10.000 agentes de ICE y la movilización de 2.000 efectivos de la Guardia Nacional en Los Ángeles para frenar protestas, medida que generó fuertes críticas de la oposición demócrata.