“La Señora Harris va a París” conquistó a los suscriptores con una trama encantadora, vestuario de ensueño y una protagonista inolvidable.
Netflix sigue sorprendiendo con producciones que, sin grandes campañas de marketing, logran posicionarse entre las más vistas por su poderosa narrativa. Ese es el caso de La Señora Harris va a París (Mrs. Harris Goes to Paris), una película basada en una historia real que ha superado todas las expectativas y se ha ganado el corazón del público.
Una historia de sueños, lucha y moda
La película, ambientada en la Londres de la posguerra, cuenta la historia de Ada Harris, una humilde y entrañable empleada doméstica que, tras quedar viuda, encuentra inspiración en un deslumbrante vestido de la casa Dior. Fascinada por su elegancia y lo que representa, decide embarcarse en un viaje transformador: ahorrar hasta el último centavo para viajar a París y comprarse uno igual.
Lo que podría parecer una historia simple, se convierte en una poderosa lección de resiliencia, valentía y dignidad. A lo largo de su travesía, Ada deberá enfrentarse a prejuicios de clase y obstáculos inesperados. Pero su determinación y calidez cambiarán no solo su destino, sino también el de quienes la rodean.
Un homenaje a la moda y a las segundas oportunidades
Dirigida con sensibilidad y basada en la novela homónima de Paul Gallico, La Señora Harris va a París se destaca no solo por su emotivo guion, sino también por su espectacular diseño de vestuario. La reconocida diseñadora Jenny Beavan, ganadora del Oscar, trabajó con archivos históricos de la casa Dior —incluyendo bocetos y patrones originales— para recrear con autenticidad los trajes que deslumbran en pantalla.
El resultado es un film que combina ternura, humor, crítica social y un despliegue visual que enamora tanto a fanáticos del cine como de la moda.
Éxito inesperado
Sin necesidad de grandes efectos ni superproducciones, la película ha escalado rápidamente entre los contenidos más vistos de Netflix en varios países. Su éxito radica en el boca a boca de los usuarios y en su mensaje universal: nunca es tarde para perseguir un sueño.
La Señora Harris va a París es una joya escondida que, gracias a su sensibilidad, elegancia y espíritu inspirador, se ha convertido en una de las favoritas del año dentro del catálogo de Netflix.
