Murió Ozzy Osbourne, leyenda del heavy metal y alma de Black Sabbath

El “Príncipe de las Tinieblas” falleció rodeado de su familia, pocos días después de brindar un emotivo show de despedida con los miembros originales de Black Sabbath. Su legado marcó un antes y un después en la historia del rock.

Ozzy Osbourne, ícono absoluto del heavy metal y fundador de la mítica banda Black Sabbath, murió este martes a los 76 años. La noticia fue confirmada por su familia mediante un comunicado en redes sociales: “Con una tristeza mayor de la que las palabras pueden expresar, debemos informar que nuestro querido Ozzy falleció esta mañana. Estuvo acompañado de su familia y rodeado de amor”.

Su esposa Sharon y sus hijos Jack, Kelly, Aimee y Louis pidieron respeto por su privacidad en este difícil momento.

La noticia de su fallecimiento llega pocos días después de lo que fue su última aparición en el escenario. En un concierto histórico celebrado en Villa Park, Birmingham —su ciudad natal—, Ozzy se reunió con los miembros originales de Black Sabbath: Geezer Butler, Tony Iommi y Bill Ward. Durante el show, interpretaron cinco temas clásicos y celebraron una noche cargada de emociones que incluyó incluso una propuesta de matrimonio de Sid Wilson (Slipknot) a Kelly Osbourne, la hija del cantante.

Ozzy ya había anunciado su retiro definitivo de los escenarios debido al avance del Parkinson, enfermedad que reveló públicamente en 2020. A pesar de su deteriorada salud, mantuvo siempre una conexión inquebrantable con sus fanáticos y se despidió de ellos con una sonrisa.

Nacido como John Michael Osbourne en 1948, creció en un barrio obrero de Birmingham. Tuvo una juventud difícil marcada por pequeños delitos y un breve paso por prisión. Pero su vida cambió al escuchar “She Loves You” de The Beatles, canción que lo inspiró a dedicarse a la música.

Tras varios intentos fallidos con otras bandas, en 1969 nació Black Sabbath, grupo que revolucionó el rock con sus guitarras pesadas, letras oscuras y la inconfundible voz de Ozzy. El primer álbum, Black Sabbath (1970), fue un éxito rotundo, seguido por himnos como Paranoid y Iron Man.

En 1978, Ozzy fue expulsado de la banda por sus adicciones, pero lejos de apagarse, volvió a brillar como solista. Con la ayuda de Sharon Arden —quien más tarde sería su esposa— lanzó Blizzard of Ozz (1980), un álbum legendario que incluyó clásicos como Crazy Train. Durante esa etapa, protagonizó episodios tan excéntricos como morder la cabeza de un murciélago en vivo, reforzando su mística como el “Príncipe de las Tinieblas”.

En los años 90, creó el festival Ozzfest, que impulsó a nuevas bandas de metal en todo el mundo. En 1999, se reunió nuevamente con Black Sabbath y ganaron un Grammy por Iron Man. Repetirían la hazaña en 2013 con God Is Dead?.

Su fama llegó también a la televisión con el reality The Osbournes, emitido por MTV en 2002, que mostraba la vida cotidiana de la familia y se convirtió en un fenómeno global.

Ozzy Osbourne deja un legado imborrable. Su carrera fue una mezcla única de excesos, genialidad y carisma, que lo transformaron en una de las figuras más influyentes de la historia del rock. Su voz, su estilo y su espíritu rebelde seguirán sonando eternamente en los corazones de millones de fans alrededor del mundo.